| 1 cuota de $25.900 sin interés | CFT: 0,00% | TEA: 0,00% | Total $25.900 |
| 1 cuota de $25.900 sin interés | CFT: 0,00% | TEA: 0,00% | Total $25.900 |
| 3 cuotas de $8.633,33 sin interés | CFT: 0,00% | TEA: 0,00% | Total $25.900 |
| 2 cuotas de $15.325,03 | Total $30.650,06 | |
| 6 cuotas de $5.874,12 | Total $35.244,72 | |
| 9 cuotas de $4.397,82 | Total $39.580,38 | |
| 12 cuotas de $3.696,57 | Total $44.358,93 | |
| 24 cuotas de $2.758,45 | Total $66.202,99 |
| 3 cuotas de $10.471,37 | Total $31.414,11 |
| 3 cuotas de $11.035,99 | Total $33.107,97 | |
| 6 cuotas de $6.077,86 | Total $36.467,20 |
| 6 cuotas de $6.121,46 | Total $36.728,79 | |
| 9 cuotas de $4.580,55 | Total $41.225,03 | |
| 12 cuotas de $3.751,39 | Total $45.016,79 |
| 18 cuotas de $3.042,38 | Total $54.762,96 |
La felicidad puede encontrarse en una pista de patinaje sobre hielo, no importa las veces que caigas ni lo estrepitosas que sean las caídas. En hacer un muñeco de nieve, o en revisitar argumentos para convencer a una amiga rusa de lo apasionantes que son las novelas de Jane Austen, o en descubrir el erotismo de los Juegos Olímpicos mientras se intenta aprender a tirar con arco y flecha. «Qué maravilla estar entre humanos y no entender nada», afirma Virginia Higa en el primer párrafo, regalándonos casi sin proponérselo una contraseña de lectura para este libro repleto de asombros e impresiones.
Unos meses antes de publicar Los sorrentinos, su aclamada primera novela, Virginia Higa se fue a vivir a Estocolmo, en donde formó una familia y comenzó a escribir estos textos que combinan de manera personalísima el ensayo y la crónica como una forma de dar cuenta de cómo es vivir en un país de noches largas y abundancia de vocales. Un recuento de los amigos y amigas que recibe en su casa sueca la lleva a una hermosa reflexión sobre el sentido de la hospitalidad. La crianza de un niño pequeño, a descubrir los límites de una sociedad así como alianzas inesperadas. En la senda de sus admiradas Hebe Uhart, Natalia Ginzburg y Wisława Szymborska, Virginia Higa puede posarse tanto en las pequeñas como en las grandes cosas y no hace distinción entre la curiosidad intelectual y la experiencia sensible.
El hechizo del verano es una invitación a abrir la mirada y a dejarse encantar por el humor, la inteligencia y la enigmática belleza de las palabras, como en las buenas conversaciones.
