Mágicos como luciérnagas liberadas en un descampado, los poemas de Mercedes Romero se tejen en santa clara, el punto más fácil y universal, aunque también el más efectivo.
Profundos y despojados, su brevedad no es sino la condensación necesaria del brillo de la palabra urgente. "...Y es que Luciérnagas en frascos es un libro, pero también una linterna en cada cueva" del prólogo de Irene X